Aquí les mostramos cómo quedó el puente peatonal que ahora comunica a las veredas Sabana Baja y Vijagual, en el Corregimiento Uno.
Por mucho tiempo, las más de 20 familias campesinas que viven cerca a las quebradas La Lomera y La Jabonera tuvieron que convivir con el riesgo de no contar con un puente peatonal seguro para su paso hacía la vereda Vijagual.
Ese puente rústico, tipo hamaca, que construyeron ellos mismo para poder transitar, es cosa del pasado; ya que el Gobierno del alcalde Juan Carlos Cárdenas priorizó la protección de sus vidas con la construcción de un nuevo puente peatonal.
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Es así como ahora cuentan con un puente atirantado de longitud de 15 metros, cimentado en concreto y con plataforma en madera.
Una obra de calidad que da solución definitiva al riesgo que les tocaba afrontar en tiempos de lluvia, además de la inestabilidad de la anterior estructura que no cumplía con las mejores condiciones técnicas.
«Uno caminaba y las tablas se podían partir. Este nuevo puente tiene más protección, es más alto y más resistencia», comentó Michel Gutiérrez, estudiante Colegio Vijagual.
Por otra parte, Jaime Goyeneche, edil Corregimiento Uno afirmó, «las familias que vivían al otro lado de la quebrada, cuando crecía quedaban incomunicados».
También Dayana Torres, habitante del sector contó, «llevo 12 años de vivir acá y me da mucha alegría por el puente. Era mucho el peligro que había para los niños. Cuando crecía la quebrada era un calvario pasar».
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La inversión de esta obra asciende a los $95 millones.
Cabe señalar que, esta intervención se realizó en el marco del Manual de Espacio Público de Bucaramanga y el Plan Maestro de Espacio Público. Así mismo, ajusta a las normas técnicas colombianas de accesibilidad y Sismo Resistencia.
¡En Bucaramanga la vida es sagrada!