En 30 instituciones oficiales de la ciudad se adelanta esta estrategia que promueve la solución pacífica de conflictos para fortalecer la convivencia escolar.
Desde las aulas de los colegios públicos de Bucaramanga se trabaja en fortalecer la sana convivencia, promover la tolerancia, el respeto y prevenir situaciones de riesgo.
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“Más de 1.000 estudiantes están recibiendo este proceso de formación educativa, habilidades socioemocionales, liderazgo, inteligencia emocional, resolución de conflictos y justicia restaurativa”, explicó Jessica Pinzón, coordinadora de la iniciativa por parte de la Secretaría del Interior.
Las actividades se adelantan por medio de talleres lúdico-recreativos, dirigidos por un equipo de profesionales interdisciplinarios que hacen parte de los Gestores de Convivencia de la Alcaldía.
Joel Quintero, estudiantes de grado 11 del colegio Aurelio Martínez Mutis, expresó que “esto es algo que necesitamos todos: cómo aprender a afrontar conflictos y llegar a una solución de la forma más apropiada posible, sin ofender a nadie”.
Marisol Quesada, además de ser docente de lengua castellano del colegio en mención, es conciliadora en equidad. Ella está convencida que desde edades tempranas se puede educar en prevención de violencias.
“La medicación y la formación de estudiantes en esas habilidades permiten una formación integral, generando una transformación frente a las diversas situaciones que se puedan presentar”, dijo.
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En noviembre, el Municipio adelantará un encuentro de todos los estudiantes que hacer parte de este proceso formativo.
¡A través de estas acciones seguimos trabajando de manera integral por la recuperación del tejido social y la construcción de una sana convivencia en los entornos escolares!