Foto: Alcaldía de Bucaramanga
En un operativo de seguridad y control liderado por el secretario del Interior, coronel Gildardo Rayo, en articulación con la Policía Metropolitana de Bucaramanga (MEBUC), se logró la incautación de 10 kilos de marihuana, valorada en aproximadamente $20 millones. Este esfuerzo conjunto evitó que una cantidad significativa de estupefacientes llegara al mercado negro de la ciudad.
El operativo, que se realizó gracias a labores de inteligencia y la cooperación de la ciudadanía, permitió la detención de un vehículo sospechoso en el barrio San Francisco. La información suministrada por ciudadanos alertó a las autoridades sobre un automóvil Kia Picanto, color gris, de placas RAZ-198, que transportaba varios kilos de marihuana.
El Grupo de Operaciones Especiales (GOES) de la Policía MEBUC, junto con el seguimiento de las cámaras de seguridad, facilitó la localización y detención del vehículo. El comandante operativo de Seguridad Ciudadana, coronel Diego Fernando Pinzón Poveda, indicó: “Ubicamos el vehículo en el barrio San Francisco. Lo detuvimos y nuestros uniformados iniciaron la revisión para constatar que transportaba el estupefaciente”.
El Secretario del Interior Coronel Gildardo Rayo informó al respecto: “Dentro del automóvil, las autoridades encontraron 10 paquetes sellados, con un peso total de 10 kilos, que contenían marihuana tipo cripy. El conductor del vehículo, identificado como Johan, de 25 años de edad, fue capturado por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y fue puesto a disposición de la Fiscalía”.
El coronel Pinzón Poveda destacó la importancia de estos operativos: “Esta marihuana tiene un valor cercano a los $20 millones. Con estos operativos logramos afectar las finanzas de los grupos dedicados al tráfico de estupefacientes, pero sobre todo evitamos que esta droga sea ofrecida a nuestros ciudadanos, en especial, protegiendo a nuestros jóvenes”.
LA Administración Municipal invita a la comunidad para que denuncie y continúe colaborando en la lucha contra el tráfico de estupefacientes y la presencia de expendedores y lugares de comercialización de drogas a través de la línea 123 o los números de los cuadrantes en cada barrio o localidad.
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