Con la siembra de árboles de especies nativas en sectores donde la mano del hombre ha causado quemas con daños en la naturaleza, la Alcaldía de Bucaramanga adelanta un proceso de reforestación junto a un grupo de trabajadores de la EMAB.
Fotografía: Prensa Alcaldía de Bucaramanga
Descargar audios: Jorge Orjuela, ingeniero Forestal contratista subsecretaría Medio Ambiente de Bucaramanga / Leonardo Palencia ingeniero forestal contratista Secretaría Infraestructura de Bucaramanga.
En lotes cercanos a sectores habitacionales, que eran considerandos terrenos baldíos por su escasa vegetación, hoy se recupera el suelo con una puesta en nueva vegetación, que en tres años mostrará su frondosidad.
¿Por qué es importante un árbol?
Los árboles son seres vivos que están trabajando 24 horas para nosotros. Además de ser generadores de oxígeno, purifican el aire y controlan la humedad”, precisó Jorge Orjuela, ingeniero Forestal contratista de la Subsecretaría del Medio Ambiente de Bucaramanga.
En tiempos de pandemia por virus de Coronavirus, los árboles contribuyen a fortalecer la salud mental de los ciudadanos.
“Los árboles y las zonas verdes de la ciudad, generan condiciones para mejorar el estrés, evitan infartos, disminuyen la mortalidad en la población adulta, permite la interacción social y son los mejores espacios para los niños”, dijo.
Algunas especies nativas como Guayacanes y los Acacios que generan alimentos para la fauna natural, son árboles que generan un corredor ecológico y bilógico que beneficia a la ciudad. “Interconectan el ecosistema fracturado por el desarrollo de la infraestructura, vivienda y servicios públicos que la han poblado de cemento”, sostuvo.
Desde la Secretaría de Infraestructura de Bucaramanga se está compensando con árboles nativos las obras que se han hecho en la ciudad. En un área de casi 8 hectáreas, cerca de Villas de San Ignacio ubicado en el norte de Bucaramanga, trabajadores de la EMAB han sembrado más de 5.500 árboles de especies nativas como Nim, Gualanday, Patevaca, Pomarrosos y Guayacán amarillo y rosado.
“Con esta siembra se espera contar con un bosque con microclima y fauna especial que va a producir oxígeno y a evitar invasiones”, indicó Leonardo Palencia, ingeniero Forestaln contratista de la Secretaría de Infraestructura de Bucaramanga.
Por: Édgar A. Sánchez