El proyecto hace parte de la estrategia de Presupuestos Participativos y la inversión ascendió a los $195 millones.
Por intermedio de la recopilación testimonios y entendiendo cómo perciben y viven estos espacios públicos la comunidad, se diseñó y se hizo realidad una transformación de calidad.
La intervención contempló un nuevo mobiliario, áreas verdes, la instalación de bancas, la siembra de árboles guayacanes y la iluminación LED de última tecnología, entre otros aspectos. Una arquitectura socialmente responsable e incluyente.
Con determinación se quiere devolver el sentido de apropiación a las personas sobre estos sitios, en donde todos nos encontramos como iguales. Acciones similares se realizan actualmente en sectores como La Ceiba, Los Almendros, El Jardín, Provenza y Diamante I.
La viabilidad jurídica, técnica y financiera fue fundamental para sacar adelante estos trabajos. A costos razonables se propicia bienestar. ¡Gobernar es Hacer!
Por Félix Cristancho / Prensa Alcaldía de Bucaramanga