Pese a que la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, ANLA, considero que no era la competente para autorizar la ampliación del plazo para disponer residuos sólidos en El Carrasco (que culmina 3 de mayo de 2021), actualmente el Municipio se encuentra amparado por el Decreto de Emergencia 0365 de 2020 que estableció, con base en el concepto del Comité Municipal de Gestión del Riesgo y el Comité Epidemiológico, 24 meses para realizar la disposición final en dicho relleno. Así las cosas, se evita un problema de salud pública para los ciudadanos.
Descargue audio: Helbert Panqueva, subsecretario de Medio Ambiente de Bucaramanga
Es importante recordar que la Alcaldía ha realizado todos los esfuerzos técnicos y administrativos en la búsqueda de un nuevo sitio que permita reemplazar El Carrasco, situación que no se ha podido culminar debido a la fuerte oposición social de las comunidades.
La Empresa Municipal de Aseo de Bucaramanga, EMAB, en coordinación con la Alcaldía, le solicitó a la ANLA la ampliación de seis fases de la celda dos, donde actualmente se disponen los residuos para garantizar el cumplimiento del plazo de 24 meses establecido en el Decreto de Emergencia, con el fin de continuar con el Plan del Cierre ordenado judicialmente.
La ANLA evalúo la solicitud y considero que, de acuerdo a las características técnicas de la misma, el competente para definir su viabilidad es la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, CDMB, como autoridad ambiental regional.
Así las cosas, el Decreto de Emergencia contempla un plan de trabajo construido conjuntamente con el Acueducto Metropolitano de Bucaramanga, amb, la EMAB y el Área Metropolitana de Bucaramanga, AMB, en donde se tienen contempladas una serie de actividades para garantizar la adecuada operación de la celda donde actualmente se disponen los residuos, especialmente las 530 toneladas diarias que producen los habitantes de la ciudad.
Asimismo, desde la Alcaldía se continúa trabajando en la gestión integral de residuos mediante el fortalecimiento del proceso de reciclaje, tratamiento de orgánicos (compos y biodogestión), se evalúan nuevas tecnologías para la disposición final y especialmente se insiste en la búsqueda de un sitio donde construir el proyecto de gestión industrial de residuos, que solucione este gran pendiente histórico.
Cerrar El Carrasco no es exclusivamente una problemática de residuos, sino primordialmente de salud pública, que en tiempos de la COVID 19, causaría una grave afectación a toda la ciudadanía. Por tal razón, con determinación se buscan alternativas que permitan un proceso de cierre, clausura y pos clausura favorables y que genere mínimas afectaciones. ¡Gobernar es Hacer!
Por Félix Cristancho / Prensa Alcaldía de Bucaramanga